Mastitis hemorrágica en vacas

En el período posterior al parto, las vacas a veces desarrollan mastitis. Esta enfermedad tiene muchas formas, pero cada una de ellas es peligrosa para las vacas. Una de las variedades es la mastitis hemorrágica en vacas. Por lo general, ocurre en el contexto de otras formas de enfermedad de la ubre. Es importante que los agricultores sepan cómo se manifiesta este tipo de mastitis, por qué es peligrosa y cómo tratarla.

Ubre de vaca sana

¿Qué es la mastitis hemorrágica en las vacas?

La mastitis hemorrágica es una inflamación aguda de la ubre. Se caracteriza por un fuerte aumento en la permeabilidad de las paredes vasculares, por lo que la sangre se filtra hacia los tejidos de la ubre, los alvéolos y los conductos galactóforos. Esta enfermedad generalmente se desarrolla en el período posterior al parto, y otras formas de mastitis, catarral o serosa, a menudo actúan como sus predecesoras.

El curso de la enfermedad comienza abruptamente, en los primeros días después del parto.. El proceso inflamatorio cubre una parte importante de la glándula mamaria, la mitad o todo el órgano. Al mismo tiempo, la ubre se hincha, se calienta, aparecen manchas moradas en la piel, mientras que la vaca siente una gran ansiedad por el dolor. El proceso inflamatorio se acompaña de un aumento de temperatura.

Causas

Dado que este tipo de mastitis es una forma complicada de inflamación catarral o serosa de la ubre, la razón principal de su aparición es un tratamiento ineficaz de la ubre o su ausencia. La inflamación de la cisterna de leche, no detectada a tiempo, adquiere paulatinamente nuevas formas de daño. Considere los factores que conducen al desarrollo de mastitis hemorrágica:

  1. Disminución de la inmunidad en las vacas.
  2. Mala higiene de la ubre.
  3. Técnica de ordeño incorrecta.
  4. Lesiones y microtraumatismos de la ubre (grietas en los pezones, pinchazos, abrasiones).
  5. Mantener una vaca en un suelo frío, una corriente de aire.

Lesiones y microtraumatismos de la ubre.

Síntomas de mastitis hemorrágica.

Poco después del parto, el ganadero puede detectar los siguientes síntomas de la enfermedad en una vaca:

  1. La ubre está edematosa, dolorosa, caliente, los pezones del lóbulo inflamado están hinchados.
  2. La leche es acuosa con escamas, de color rosa o rojo.
  3. Se ve afectada la mitad del tanque de leche o toda la glándula.
  4. Hay manchas de color rojo oscuro en la piel de la ubre.
  5. El animal parece abatido, letárgico.
  6. El apetito desaparece, falta chicle.
  7. La temperatura corporal sube a 40,5-41 grados.
  8. Muy a menudo la actividad de la parte anterior del estómago se detiene.
  9. La respiración se aceleró.
  10. El ritmo cardíaco se acelera.
  11. Es posible extraer leche de la parte sana del tanque de leche, pero la producción de leche se reduce significativamente.

¡Atención! Un signo característico de la mastitis hemorrágica es que las membranas mucosas adquieren un tinte amarillo. Esto se debe a la pérdida de una parte importante de los glóbulos rojos. Sin embargo, tal síntoma aparece en individuos individuales.

Diagnóstico

El diagnóstico de mastitis hemorrágica se realiza sobre la base de un examen de la ubre y una evaluación del estado general del individuo. Para determinar el agente causante de la enfermedad, se toman muestras de leche. El pronóstico suele ser bueno si la inflamación sólo ha afectado a la ubre y no se ha extendido a otros órganos. El animal, con el tratamiento adecuado, se recupera en 10 días.

muestras de leche

muestras de leche

Tratamiento

La terapia incluye:

  1. Garantizar condiciones normales de detención.
  2. Extracción de leche, masaje, higiene de ubre.
  3. El uso de antibióticos (tetraciclina, estreptomicina) por vía intramuscular o intravenosa y local con catéter.
  4. Ungüentos para frotar que alivian la inflamación.
  5. Compresas, cataplasmas.

Una vaca enferma debe ser trasladada a un establo. Allí se deben organizar buenas condiciones para ella: ropa de cama suave, humedad óptima, sin corrientes de aire. En los primeros días después del inicio del tratamiento, no se debe ofrecer a la vaca alimentos jugosos ni bebidas abundantes, ya que esto contribuye a la producción intensiva de leche.

El bombeo se realiza periódicamente a mano, cada 3-4 horas. Después de 2 días, se puede comenzar a masajear el tanque de leche, cuyo propósito es eliminar las focas nodulares. Se frotan ungüentos en la glándula mamaria: ictiol, salicílico, alcanfor, que ayudan a estimular la circulación sanguínea, calentar y aliviar la inflamación en el lóbulo afectado.

¡Atención! Hasta que se elimine la inflamación aguda, es inaceptable masajear la ubre.

La administración intramuscular o intravenosa de antibióticos permite destruir el agente causante de la enfermedad: estreptococos, estafilococos, E. coli u otros. Qué tipo de infección ha invadido la ubre se aclarará tras un estudio de laboratorio de muestras de leche.

Administración intramuscular o intravenosa de antibióticos.

Administración intramuscular o intravenosa de antibióticos.

Se logra un buen resultado con la introducción de antibióticos de la serie de penicilina con novocaína en los conductos galactóforos utilizando un bote. Este procedimiento se lleva a cabo únicamente después del ordeño. La terapia local incluye medidas destinadas a diluir los coágulos de sangre formados que obstruyen los conductos lácteos. Deben lavarse con una solución salina débil (concentración del 3%) o con una solución de pepsina (5%). 4-5 procedimientos son suficientes para todo el curso del tratamiento.

medidas preventivas

Será posible evitar el desarrollo de mastitis hemorrágica si se siguen las siguientes medidas preventivas:

  1. Es necesario diagnosticar la ubre de manera oportuna; inspeccione siempre si hay microfisuras en los pezones, hematomas o rasguños.
  2. Observe la higiene de la glándula mamaria: debe ordeñar la vaca con las manos limpias, antes de decantar y después, la glándula debe lavarse con agua tibia y limpiarse con una toalla limpia.
  3. Mantenga al animal en condiciones adecuadas: limpio y abrigado.
  4. Siga las reglas del ordeño con un masaje preliminar de la ubre.
  5. Si se encuentran sellos en el tanque de leche, así como cambios en la consistencia de la leche, comience a tiempo el tratamiento de la mastitis para evitar complicaciones.

La mastitis hemorrágica en una vaca es una condición peligrosa que requiere intervención inmediata y una terapia adecuada. Si se encuentra sangre en la leche y manchas rojas y edema en la ubre, debe comunicarse inmediatamente con el servicio veterinario. El tratamiento debe iniciarse lo antes posible. En su ausencia, el riesgo de desarrollar necrosis y sepsis es alto, lo que provocará la muerte de la vaca.

Autor: Olga Samoílova

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