¿Cómo sacar muchos calabacines de un arbusto? Dando forma con un secreto

¿Quieres obtener una gran cosecha de calabacines con un solo arbusto? Es bastante fácil. Existen varios secretos que ayudarán a aumentar varias veces la cantidad de frutos cosechados. Cuidar esta cultura no es nada difícil, incluso un jardinero novato puede manejarlo.

¿Qué hay que eliminar?

Una regla importante para la formación de arbustos de calabacín es que el procedimiento debe realizarse en un clima seco y despejado. Esto es necesario para que las secciones tengan tiempo de secarse y no entren microorganismos patógenos. También es importante desinfectar las secciones con ceniza o carbón activado triturado.

¿Qué se debe eliminar? Para empezar, retira todas las hojas que tocan el suelo y recuéstate sobre él. Esto minimiza la probabilidad de infecciones e insectos.

Además de las hojas, es aconsejable deshacerse de las flores masculinas estériles. Es fácil distinguirlos de las femeninas: en las flores femeninas hay un engrosamiento en el lugar del futuro feto, en las masculinas está ausente. Casi todas las flores masculinas deben eliminarse, solo le quitan al arbusto la nutrición necesaria para el cuajado. Sin embargo, a lo largo de la temporada, en ningún caso elimine absolutamente todas las flores vacías, ya que son necesarias para polinizar las flores femeninas. Y si cultivas híbridos autopolinizantes, entonces no se necesitan inflorescencias masculinas, puedes deshacerte de ellas por completo.

También existe la práctica de cortar las hojas más grandes, pero no del todo, hay que dejar el tallo. Esto se hace para evitar la pudrición de los ovarios y la sombra, y para una mejor transpirabilidad.

Además, los primeros frutos deben retirarse antes de que hayan alcanzado los 10 cm de longitud. Necesitas deshacerte de 2-3 piezas. Coseche el arbusto con regularidad. Si los frutos comienzan a crecer demasiado, esto puede agotar el arbusto.

Cuidar los calabacines

La formación de arbustos no es la única regla que se debe seguir al cultivar calabacines.

Esta es una cultura amante de la humedad. Para el riego, tome agua tibia y sedimentada. El procedimiento se realiza por la noche. Debajo de un arbusto se vierten hasta 4 litros de agua. Pero en general, la cantidad de riego depende del clima; en tiempo lluvioso, se minimiza el riego.

No te olvides del aderezo habitual. El calabacín responde bien a los fertilizantes con infusiones verdes preparadas a partir de malas hierbas sin semillas. Con esta composición, puedes alimentar el cultivo una vez a la semana. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el fertilizante verde es muy concentrado, por lo que hay que diluirlo con agua en una proporción de 1:10. Es bueno alimentar los calabacines con cenizas. Para ello se diluye en agua a razón de 1 vaso por cada 10 litros de agua. Con esta composición, los arbustos se riegan desde la raíz. Se pueden alternar los medios: fertilizante verde y ceniza diluida.

Un buen resultado al cultivar calabacines se obtiene con mantillo. Para ello es adecuado el césped cortado. Para empezar, bastará con una capa fina y, una vez seca, se añade la hierba. El acolchado ayuda a retener la humedad en el suelo durante mucho tiempo. Además, con el tiempo, las materias primas se convierten en aderezo orgánico, que le gusta mucho al calabacín.

¿Cultivas calabacines en tu jardín? ¿Tiene algún secreto para obtener una rica cosecha de este cultivo? Compártelos con nuestros lectores en los comentarios.

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